Muchos son los trabajos que coinciden, en que estamos ante una manifestación de una antigua danza de cintas ya desaparecida. Sobre este aspecto coincide que en la parte final del tema, aparece un tajaraste similar en el paso, y con algunas modificaciones en las mudanzas, que es semejante a uno de los estilos de la danza de cintas que actualmente se sigue realizando en el barrio de La Florida.
En el historial de Coros y Danzas encontramos la siguiente información:
“Rescatado en 1960 por el grupo de Coros y Danzas en la Florida Alta. Creemos que procede de un tanganillo… Las coplas de carácter marino, son creadas por todos los componentes”.
Toda esta información dista mucho de la realidad, ya sea por la posibilidad de preservar las fuentes de donde se obtuvo el tema o por recelo de que fuera copiado. El “Tango de La Florida”, es una pieza musical que se incorpora en Coros y Danza de La Orotava tardíamente, allá por 1970, gracias a la información de Ceferino García García, conocido con el seudónimo de “Manolo Quintero”, natural del barrio de La Vera, barrio fronterizo entre los municipios de Los Realejos, Puerto de la Cruz y La Orotava.
Ceferino García García, “Manolo Quintero”, nace en el barrio de La Vera Alta (perteneciente al Puerto de La Cruz) el 27 de agosto de 1927. Era un gran amante de nuestro folklore. Ya desde muy joven forma parte de La Parranda de La Vera y aunque toca la contra, se caracteriza por ser un gran bailador.
Ceferino “era muy parrandero”, así lo afirma su mujer Lina Rodríguez García: “…trabajaba todo el día y después iba todas las noches a los hoteles en el Puerto, lo veíamos menos…, estuvo así hasta que a los cincuenta años, más o menos, enfermó”.
En una entrevista realizada a la directora de Coros y Danzas de La Orotava, Ofelia Díaz Hernández, publicada en el periódico EL DIA en 1975, aporta los siguientes datos:
“El Tango de La Florida fue recogido precisamente en este barrio orotavense”
“La fecha aproximada desde que se baila y según nuestras investigaciones, le diré que alcanza tiempos tan viejos, que ni los viejos de antes recuerdan cuando empezó. En la historia de Canarias se hace referencia a la belleza de esta danza que los peregrinos ofrecían a la Virgen María”
“Fue recogida por el abuelo de Ceferino García, en cuya familia hubieron muy buenos bailadores. El historial y la fecha fue recopilada por este señor hace unos ochenta años”.
A raíz de toda esta información, surgen muchas preguntas: ¿Por qué esta pieza musical recibe el nombre del Tango de La Florida? ¿Qué relación existe entre Ceferino natural de La Vera del Puerto de la Cruz y el barrio orotavense de La Florida? ¿Cómo llega Ceferino García a convertirse en componente y responsable del baile en Coros y Danzas de La Orotava?
Después de entrevistarnos con la familia del mismo y con varios componentes de Coros y Danzas de La Orotava, podemos concluir lo siguiente:
En 1966, después de que Coros y Danzas de La Orotava regresan de participar en Madrid en un programa de Eurovisión, titulado Caminos y Canciones, y en el Concurso Nacional correspondiente a dicho año, son varios los componentes, que por diversas razones, causan baja en dicha Agrupación, entre ellos Manolo Cabrera, director de baile. Al poco tiempo debían actuar en un concurso en Santa Cruz, por lo que apresuradamente tuvieron que buscar tocadores y bailadores. En esa época, formaba parte de la parranda, María Encarnación Abrante Méndez, conocida por “Choni”, que se convierte en solista femenina del grupo juvenil y del adulto de Coros y Danza de La Orotava, desde 1966 hasta 1976.
María Encarnación “Choni” nace el 11 de junio de 1951. Su madre Encarnación Méndez García era natural de Los Realejos, y su padre Manuel Abrante González, natural de La Higuerita (hijo de Pancho Abrante, encargado de la finca de Los Brier). Los dos pertenecen a familias de grandes parranderos, como nos dice María Encarnación: “recuerdo que desde muy pequeña, cuando mi padre llegaba de trabajar, cogía la guitarra y cantaba una isa y luego le tocaba otra a mi madre. Mi padre decía Chonita canta, y Chonita cantaba”.
De entre los familiares de María Encarnación “Choni”, debemos destacar a su tío Salvador Abrante, gran tocador que dominaba la guitarra, púa y violín, quien formaba parte de la antigua parranda de La Vera.
Debido a la situación en la que se encontraba Coros y Danzas, María Encarnación “Choni” trae a su tío, Salvador Abrante, para formar parte de la parranda de Coros y Danza de La Orotava, y este a su vez, convence a Ceferino García, “Manolo Quintero”, para hacerse cargo del cuerpo de baile de la Agrupación.
Durante el poco tiempo que Ceferino forma parte de Coros y Danzas, un año aproximadamente, 1966 – 1967, informa de que era conocedor de un baile, “un tango”, que si tenemos en cuenta las palabras de Ofelia, es aprendido de su abuelo. Ceferino enseña el baile y tararea la melodía para que la parranda pueda conseguir tocarla.
De las letras, solo recordaba la copla: “Rosa encantada / de Alejandría, / las que cantaba / la Virgen María”; que aunque carece de coherencia, se mantiene. El resto de coplas son inventadas por los propios componentes de Coros y Danzas y personas cercanas, entre ellas Marina, la madre de Ofelia, y Encarnación Méndez, madre de María Encarnación “Choni”.
La letra que aún se conservaba en los archivos de la Sección Femenina era la siguiente:
Este es el baile de La Florida,
lo bailan los magos, con mucha alegría.
Rosa encantada, de Alejandría,
la que cantaba la Virgen María.
Yo me fui al monte a buscar horquetas,
y traje cambadas y otras derechas.
Si tú me quisieras, yo me casaría,
gofito y cebollas no nos faltarían.
Molinos de gofio tengo en La Florida,
con eso y mis cabras, me gano la vida.
Actualmente no encontramos ninguna relación de la familia de Ceferino García con el barrio orotavense de La Florida, por lo que deducimos que dicho baile recibe el nombre de “Tango de La Florida” debido al gran cariño y cercanía que Ofelia, delegada de la Sección Femenina de La Orotava, tenía a ese barrio.